En verdad te digo, Devesa de Curueño, un pueblecito rural de la provincia de León, tirando p'al Norte, todavía tiene vacas...como otros tantos y similares por el estilo. Y yo siempre quiese ser una de ellas. En verdad te digo. Sí, porque la vaca es un animal tan noble y generoso -nos lo da todo, como el cerdo, pero son mucho más limpias que el puerco- que me encanta porque somos como primos-hermanos: yo también soy noble y generoso, lo que pasa es que no sé cómo hacer constar mi generosidad porque no tengo un chavo. En verdad te digo... De pequeño, cogía dos palos de avellanar, pulía sus extremos inferiores como si de dos pezuñas se vaca se tratara y me iba detrás de ellas caminando al igual que ellas, dando esos pasitos quedos pero firmes, una pezuña de atrás sin pisar a la de adelante, a un ritmo tipo Bolero de Ravel, en su primeros compases. Ellas se daban perfecta cuenta de lo que yo hacía y aspiraba a ser y me acogieron como una vaquita más, mugiéndome y lamiéndome con cariño; haciéndome, a veces, un corro y moviendo la cola-quita-moscas al mismo compás. ¡Qué ratos tan maravillosos de la infancia vacuna mía..! En verdad te digo. Y, además, en Devesa de Curueño, un pueblecito que todavía tiene vacas...como muchos otros tantos y similares por el estilo. ¡Ay, las vacas de Devesa, cómo me embelesan, muuuu!
Iñaki
5 comentarios:
Lo que no se te ocurra a ti...
Es divertido imaginarte de crío haciendo "el vaca"
Ahora entiendo mejor tus relatos y comprendo que esa desbordante imaginación se fue fraguando en tu más tierna edad, cuando aún era un "ternerito.
Gracias por compartir la experiencia y por hacerme reír con tus cosas, aunque yo soy más de ovejas.
Muy bueno, muy bueno... y qué fotografía más maja!!! Me ha encantado!
Sólo a ti se te podía ocurrir un deseo tan extraño y tan divertido. Gracias por hacerme soltar la carcajada con tus cosas. Besitos
Muuuuuu bonita la vaquita. Besitos de vuelta a todos. Begoña
Acabo de volver a la infancia -por un instante- y, sin darme cuenta- me he puesto a andar como una vaca. A mi madre le ha dado un síncope y ha comenzado a bailar el casatsó.
¡Que cuadro, hij@s míos! Los dos solos, más colgaos que la una en casa y en este plan.
¡¡¡Que venga Almodóvar y lo vea...!!!
Publicar un comentario