COMIDA DE "NAVITAF" Y ÚLTIMA TERTULIA DE 2015



Hemos celebrado la comida de Navidad, y ha sido en nuestro habitual lugar de reunión "Vía 22". Resulta muy difícil hacer coincidir a todos los integrantes del colectivo en estas fechas; muchos son los compromisos y celebración: comidas de trabajo, funciones del nieto, imprevistos... Aunque algunos no pudieron eludir las obligaciones, nos reunimos y disfrutamos de un menú no muy convencional en esta fechas, pues estabamos caprichosos y nos apetecía paella, así que la encargamos en el restaurante en que nos sentimos como en casa, y nos la hicieron tan sabrosa como en otras ocasiones, aunque hubo quien prefirió unos huevos estrellados; seguimos con dorada o entrecot y no nos pudimos resistir a los postres caseros. La comida estuvo salteada con comentarios, anécdotas, risas, que nos hicieron disfrutar hasta la sobremesa.
Para despejarnos y ayudar a hacer la digestión dimos un paseíto y tomamos café en Manolo; en esta ocasión no quisimos abusar del dulce y estábamos dispuestos a pasar sin sus deliciosos "manolitos", aunque casi fue peor el remedio que la enfermedad, pues caímos en la tentación de lleno y con todo nuestro peso, bueno, cada uno con el suyo, para "pecar" con el roscón, algunos hasta nos atrevimos con el relleno de nata: ¡cuánta dulzura, con sorpresa incluida!

Pero como no solo íbamos a comer, recorrimos el camino de vuelta y cumplimos con la reunión de TAF al completo en la última tertulia del año. Hubo villancicos, regalos, y ¡cómo no! cuentos, con temas un tanto subrealistas en esta ocasión, pues nos habíamos puesto deberes y los relatos llevaban títulos así de sugerentes: ¿Por qué los calcetines están tristes?, ¿Por qué a los caracoles les gusta la Navidad?, ¿Por qué las olas vienen y van? o ¿por qué los perros no saben contar hasta diez? Y pasamos un rato estupendo escuchando cómo habíamos salidos de este atolladero, para cubrir el expediente o el magnifico ejercicio e imaginación  de los menos. En cualquier caso fue divertido; sonreímos con los más tiernos y hasta reímos a carcajadas de algunas ocurrencias.

Celebramos que continuamos juntos, que mantenemos la ilusión por hacer cosas, por seguir inventando historias y, lo más importante, que compartimos algo más que cuentos. Más regalos, felicitaciones y fotos (de Jorge, nuestro fotografo particular en Vía 22) para despedirnos hasta el nuevo año, en que volveremos encantados de reencontrarnos y esperamos que con muchas historias más que contar, pues hemos vuelto a pedir a los reyes que las musas nos visiten, además de salud.






1 comentarios:

Arvikis dijo...

A todos os deseo una FELIZ NAVIDAD y UN AÑO 2016 con SALUD y ALEGRÍA para que podais seguir desarrollando vuestras actividades con ese buen tono que teneis. Un fuerte abrazo.
Javier