COMIDA DE NAVITAF

Celebramos nuestra comida de Navitaf, en esta ocasión en Mozzabar, restaurante sito en Conde de Peñalver. 
Empezamos con los aperitivos, mientras se reunía todo el grupo, o la mayoría de los integrantes de Taf, para seguir tomando un menú apetitoso y variado, acompañado de buen vino y cervecitas.

Como es costumbre en nuestras reuniones, además de comer muy bien, hubo charla y diversión. 


Despues llegó el momento del café y repetimos en la cafetería Manolo, un poco más arriba en la misma calle. Allí nos endulzamos la vida, a base de infusiones diversas y los inevitables croasanes. 
Hicimos tiempo mientras llegada la hora en la que habíamos quedado con nuestra compañera Begoña de Antonio, para visitar una tienda de instrumentos musicales "Ardemadrid", lugar en el que quedamos para sentirnos más próximos a la música, tema de nuestro último libro, en cuya edición ya estamos trabajando.

En ARDEMADRID, en la calle Ardemans, un lugar muy conocido por los músicos, también en nuestro barrio nos atendieron dos jóvenes encantadores, que no solo despejaron nuestras dudas y respondieron a nuestras preguntas, sino que, también, nos prestaron su espacio para hacernos unas fotos. 

Uno de ellos se ofreció para realizar las instantanéas, e incluso se hizo una con todas las "mujeres Taf". 

Estábamos tan a gusto entre guitarras y baterías que nos daba pena marcharnos; allí se estaba de maravilla y fuera hacía un frío del que muerde los huesos.

Prometimos volver con el libro editado y regalarles un ejemplar, aunque esto será el próximo año y habrán de pasar unos meses, pues ya se sabe que hay que recorrer un camino árduo desde que se terminan los textos hasta que tienes el ejemplar con ellos en la mano.

Y desde allí directos a Vía 22, que teníamos tertulia y que celebrar que ha visto la luz el nº 2 de la colección "Cuentos para un rato", y que os presentaremos en otra entrada.